Editorial de El Pais sobre el Ché

Hace un par de días anunciaba Juan Luis Cebrián que El País iba a cambiar. No sólo iba a cambiar el diseño del periódico, sino que el cambio afectaría a la manera misma de entender el periodismo: un nuevo tipo de artículos, una manera más profunda de analizar la realidad y un nuevo subtítulo del periódico acorde a la nueva situación. A partir del 21 de Octubre ya no leeremos el Diario Independiente de la Mañana sino el Periódico Global en Español.

Y quizá poniendo ya el ojo en las clases adineradas latinoamericanas a las que pretenden llegar, hoy nos sorprende con un editorial moderno, pensado para el diseñador de hoy, un editorial al que sólo le faltan los colores y un poquito más de ingenio tipográfico (¡qué pena que la celulosa sea un material tan anticuado y el Dreamweaver todavía no pueda modelarla de arriba a abajo!). Veréis que análisis tan contextualizado de la figura del Ché, qué precisión conceptual a la hora de categorizar las ideologías en dos bloques (los fanáticos totalitarios y nosotros los buenos).¡Qué agudeza la de darse por fin cuenta de que el Ché era un yihadista! ¡Qué acierto el de constatar que el Ché no era sino un caudillo más en la estela de Perón!

No sé ni cómo voy a poder dormir esta noche esperando el editorial de mañana, ese editorial donde me reconfortarán diciendo que los republicanos españoles también fueron unos terroristas que se inmolaron por sus ideas, que sacrificaron sacerdotes porque también ellos eran unos caudillos románticos (no sólo el caudillo que tenían enfrente). Cómo me gustan estos análisis en profundidad de El País, distinguiendo nítidamente entre lo buenos y los malos.